Who wants flowers when you're dead? (Caleb)

Miré el reloj plateado que decoraba mi muñeca. Las 5:17 p.m. Acababamos de bajar de mi automóvil, lo había estacionado a un costado de la entrada del cementerio. Bajamos, ambos con gafas de sol, bien podía ser para cubrirnos del sol, cubrir nuestras lágrimas o cubrir nuestra identitad. Cada uno traía en la mano un ramo de rosas blancas, mientras que con la mirada buscabamos una lápida, la de nuestra víctima mas reciente en específico para decorarla con ellas.

No lo entendía, nunca lo entendí, ¿por que llevar flores a las tumbas? ¿Quién quiere flores estando muerto? Supongo que era una competencia entre familias, ''Veamos quién tiene el muerto mas querido'', las flores te dan puntos extra. A pesar de ese ideal mío, ahí estabamos, con el ramo de rosas, caminando sobre el césped rodeado de cadaveres a seis pies bajo tierra. El lugar lucía tan solitario, o por el simple hecho de ser lo que era, le daba un aire sombrío, de no ser por todas esas lápidas y el saber el concepto de lugar, cualquiera podría considerar el cementerio un lugar agradable, el pasto era de un color verde intenso, la jardinería era digna de admirar, mientras que muchos de los mausoleos lucían elegantes y finos, otra competencia ''veamos que muerto tiene la mejor tumba'', como si al muerto le importara...

Un paseo, Liam dijo que dariamos un paseo, sentía cierto temor, por que quizás iriamos tras la pobre chica, la cual el tiene en mente desde hace unos meses, condujo hasta el sementerío entonces comprendí que ibamos a verle a ella, a la chica de hace unos meses, la que yo viole

antes de bajar me dio unos lentes oscuros, para que?, bueno no lo sé, pero al menos si quería llorar podría hacerlo sin que el me viera y se burlara, es que quien no sé siente culpable al siguiente día de haber hecho lo que hicimos, el cementerio es muy lindo, Liam también me dio unas rosas blancas, y caminamos a su lapida

esto es mucho liam le comente no entendía si lo haciamos como burla o con el debido respeto que nos debe la difunta busque su lapida con la mirada y además no me gustan mucho estos citios tu sabes lo que yo pienso de la otra vida y de la venganza de los espiritus me acomode mis lentes mientras caminaba a su lado, asi cometiera estupideces como esta
yo siempre le apoyaba

Escuché las palabras de mi amigo, sonaban casi con temor, solo conmigo mostraba su lado sensible. No pude evitar reír ante su último comentario. -Lo único que encontraremos aquí serán restos de lo que alguna vez fueron personas.- Acomodé mis lentes de sol y pude divisar la tumba que buscabamos. Caminé directamente hasta ella y dejé las flores ahí con indiferencia. -Di lo que tengas que decir.- Le dije a Caleb mientras me cruzaba de brazos y daba unos pasos atrás para darle un poco mas de intimidad.

El era el miembro mas nuevo de la pandilla, cuando le comenté creí que me denunciaría y perdería su amistad, cuando se unió a nosotros fue cuando decidí poner toda mi confianza en el, no podía reprocharle absolutamente nada, respetaba el como se sentía, su culpabilidad después de cada noche en la que actuabamos, era natural, terminar con una vida no es algo fácil de aceptar al principio, cada uno lo toma de distinta manera y supuse que llevandolo ahí podría hacerlo sentir un poco mas liberado de remordimientos.

le ofrecí una sonrisa, ante la broma que intento hacer, me faltaba mucho por aprenderle a la "banda" de mi amigo, y una de elllas es no sentir nada al matar, el "corazón de piedra" como yo le llamo, me asuste cuando me dejo solo pues tenía miedo, miedo de enfrentarme a mi mismo

ten el mejor dezcanzo, y encuentra la paz comente en seco, hice una señal de vendición, le estaba deseando encontrar la paz, una cosa que sabía yo jamás iba poseer, lo vi hay parado, cual si no significara nada esto

traes polvo? me referí a la droga la necesitaba para calmar mis nervios, y estos malditos gritos que no cesan

Rasqué mi naríz y bajé un poco mis gafas contra el sol acercandome a el, lo tomé de los hombros y le sonreí. -Soy un asesino, no un maldito traficante.- Le dije en voz baja y con frialdad. No me agradaba la idea de que mi amigo se metiera ese tipo de cosas, durante mis estudios en la universidad varias veces nos llevaron a la morgue e incluso tuve que hacer una tesis sobre los efectos de las drogas en todo el cuerpo. -¿O acaso te has atrofiado ya el cerebro tanto que no sabes la diferencia entre uno y otro?- Le pregunté mientras me levantaba, le di una palmada en la espalda y una vez de pié troné los dedos de mis manos.

-¿Acabaste con ella?- Le pregunté refiriendome a su pequeño discurso con la muerta y reí, le había hecho esa misma pregunta cuando terminó de abusar de ella sexualmente. Miré la cantidad de tumbas, en algún momento los cementerios no serán suficientes para guardar los restos de cuanto humano de paseé por la tierra, es casi matematicamente imposible. Mientras intentaba distraerme con culquier tipo de pensamiento o algo interesante en el lugar, suspiré, la verdad es que los cementerios son lugares aburridos.

maldita sea necesitaba algo de polvo, la voz de la chica rogandome piedad invadía mi cabeza, maldita sea

sentí como me toco el hombro intentandome calmar tu no entiendes liam.... le conteste no es que fuese adicto a la cocaína es que era la forma de calmar las malditas voces
pero instantes después me reí al recordar que me dijo "terminaste" cuando viole a la chica va a ser un culo difícil de olvidar ha? seguí caminando y le pase las manos por los hombros para instantes después darle un sape no vamos a dejar moño negro esta vez? tenía que empezar a divertirme con el dolor ageno, tenía que hacerlo simplemente para estar bien y a salvo conmigo mismo

Sonreí, Caleb ya intentaba llevar toda la situación de una forma mas amena, si continuaba de esa forma pronto podría ir asesinando sin tomar en cuenta los gritos, lágrimas o caras de desesperación de las víctimas. -La muerta puede conformarse con las flores por ahora, yo por el contrario tengo hambre.- Lo miré y comencé a caminar directo a la entrada para salir de ahí y buscar un restaurante de comida rápida o algo por el estilo.

-¿Estás mas tranquilo ahora?- Le pregunté mientras me detenía para esperarlo. Pude ver a un hombre de edad avanzada mirandonos con algo de curiosidad, no parecía venir a visitar a nadie, por el contrario, sus ropas estaban sucias y traía una escoba de ramas para recojer hojas en las manos, seguramente el cuidador del cementerio, lo miré por un instante con indiferencia y miré d enuevo a mi amigo.

La muerte es solo un proceso Liam confianza poco a poco me iba dando confianza, con Liam como lider, nada podría pasarme venga yo quiero comida china me reí con el y camine hasta su auto, muy bonito de lujo, yo no tenía carro simplemente porque no quería, a mi me gustaba el caminar como hiciste para conseguir esta lindura he?... me recargue en el techo del auto, depronto un hombre de actitud serena pero de avanzada edad se apareció a nuestra vista, Liam lo miro con esa mirada analizadora, suspire y me cruce de brazos

no estaras pensando en... creo que no era necesario completar frases, el sabía a lo que me refería, ¿le ibamos a matar?, a la plena luz del sol?, es que con Liam no se sabe me quede cayado mientras esperaba su respuesta, "disfrutando" de ver barrer al anciano

Al parecer la actitud de Caleb hacia lo que hacíamos estaba dando un giro positivo. Notó el como miré al anciano, no tenía nada planeado en su contra, lo que si sabía es que apenas nos fueramos iría a ver a que tumba habíamos dejado flores, con suerte pensaría que eramos amigos de la difunta, a menos que ella recibiera muchas visitas de su familia y este les comentara que dos chicos misteriosos había ido a dejar flores. Realmente no me interesaba mucho, podía acusarnos si quería, al fin y al cabo nopodría describirnosd el todo bien. -Caleb, no seas egoísta, no podemos divertirnos solo tu yo sin los demás, no sería justo.- Le sonreí con ironía y abrí la puerta del auto, indicandole al mismo tiempo que subiera del otro lado. El auto había sido un regalo de mi padre cuando me gradué, en verdad se lo agradecía, me era muy últil para ir a lugares demasiado lejos como para caminar y me evitaba el tener que tomar transporte público. -Vamos por esa comida china.- Le dije mientras cerraba la puerta del auto esperando a que hiciera lo mismo.

pero soy un abogado le dije aun sin abandonar el tono de diversión liam me daba una confianza exagerada, ahora sentía que jamás nos atraparían que eramos como una especie de dioses griegos, me indico que subiera del otro lado, y jugando con mis manos a golpear la parte del auto donde iba pasando, entre al coche, uno del año, si no es que mejor, sus padres al igual que los míos eran bien vistos ante la sociedad, a que hipocrecía, si es bien sabido que la clase en la que nos manejamos es la más asquerosa y repucnante que puede existir en la tierra al menos espera a que anochezca dije viendo por la ventana del copiloto la figura del anciano, luego me gire a mi amigo con una sonrisa malefica justo como la que tenía antes de violar a esta pobre chica, y espere a que arrancará el auto

Miré el techo del auto. -Caleb, no tengo intenciones de matar y torturar a un viejo decrepito, a menos que tu tengas muchas ganas de tirartelo.- Reí y arranque el auto. A mi me importaba muy poco violar o no a las víctimas, mi amigo porque no tenía algo estable como yo, en realidad esa es la razón por la que tengo una novia, además de que aumenta mi nivel social si presento a una jóven frente a mi familia con la que de la impresión de que tendré un compromiso en el futuro y que tendré estabilidad e iniciaré una familia, claro, ese tipo de cosas le encantan a mi padre.

siempre tienes que arruinar la diversión no deje el tono divertido en mis comentarios, minutos después me puse serio, y prendí el stereo para aburrido la llegada al restaurante, jugue a seguir el ritmo con mis dedos golpeando mi pierna, pensaba en tantas cosas, una de ellas, Nora

sabes que el tener una mujer en el grupo puede traer problemas... hablar con Liam de nora, era discución segura, y lo que menos quería era una pelea pero necesitaba sacar eso

Llevaba unos minutos conduciendo en silecio, Caleb prendió el estereo y el único sonido en el auto era el de las bocinas, hasta que escuché nuevamente su voz, esta vez una pregunta refiriendose a Nora. -Dime cuales son esos probelmas de los que hablas.- Le respondí esperando a que me diera su argumento.

Yo ya sabía que la relación de Caleb y Nora no era exactamente la mejor, el cree que ella me tiene hipnotizado y haré lo que me ordene, Nora cree que Caleb es una mala influencia que arruinará todo mi progreso. En todo caso podría deshacermse mas fácil de Nora, pero por ahora era conveniente tenerla a mi lado, aunque Caleb no comprendiera mis razones. Nora nos había propuesto una víctima, yo no encontré motivo para negarlo, de cualquier manera sea quien sea la víctima me da igual al final de cuentas pero a Caleb parecía molestarle.

gire la cabeza de un lado para otro y la deje caer pesadamente para después hablar es una mujer... le conteste tal vez eso no era sufisiente argumento ellas arruinan todo... concluí no quería decir nada, en sí nora no hacia nada, solamente distanciarme de mi amigo, pensandolo bien hace bastante tiempo que no salimos los dos solos, como cuando estabamos en la universidad, note como empezabamos a llegar al local, no dije nada, sabía que mi amigo defendería a su novia, después de todo, no soy yo el que le da las noches de sexo si no ella

llegamos... trate de cambiar de tema, aunque de mi mente no me sacaba a la hermana de la chica, sabía que Nora la había propuesto, yo no encontraba motivo para matarle, ella no era problema, y además es un poco tonto ¿después de matar a la hermana vamos a ir por el papá y así hasta a acabar con todos?

Estabamos cerca del local de comida, estacioné el auto y lo apagué. -No conocía ese lado misógino tuyo Caleb.- Lo miré a los ojos sin mostrar emoción alguna. -Bien sabes que ella es mas un pasatiempo que una relación para mi.- Finalicé saliendo del auto, no entendía que era lo que ocurría con Caleb, o porque detestaba tanto a Nora. -O ¿acaso estas celoso de ella?- Le dije sonriendo a través de la ventanilla de su lado y le abrí la puerta.

El local lucía agradable, comida china, y contaban con servicio de buffet, esa era la principal razón por la que encontraba atractivos esos lugares, si, tenía mucho dinero, pero la principal razón por la que lo conservaba era porque sabía como administrar mis caprichos. Me quedé pensando en la pregunta que le hice ami amigo, era una broma, pero a veces me daba motivos para creer que en verdad sentía una especie de celos hacia Nora.

no sabes cuanto... seguí su broma y baje del auto, ¿celos?, bueno eso nunca me lo había pensado, hasta donde yo sé me encanta el sexo con las chicas, entonces no tengo porque tener celos de su novia!!, aunque aveces mi actitud no ayudaba del todo, entramos al lugar, parecia la tipica replica de un restaurante chino en america, un buffett me encantaba ir a esos lugares, me recordaba mis años estudiantiles.

Liam... le hable mira a mi novia... tome a un pulpo entre mis manos y comence a jugar con él, infatil?, un poco si, pero me gusta divertirme a ratos quieres besarle le acerque más el pulpo

Caleb era muy infantil muchas veces. Miré el animal con repugnancia. -Es tu novia ¿no? Besale tu.- Respondí buscando una mesa vacía para tomar asiento. Solo hacía falta esperar a que alguien nos atendiera. Examiné el lugar con detenimiento, no era muy grande, y no había muchas personas, el ambiente lucía tranquilo, perfecto para entablar una conversación con alguien sin ser interrumpido.

Cuando Caleb tomó asiento yo puse mis codos sobre la mesa y lo miré a los ojos. -¿Cómo va el trabajo?- Pregunté, el y yo sabíamos que la respuesta a esa pregunta me daba absolutamente igual, pero no quería comenzar una plática seria tan de golpe. Quizás el me respondería con algo que a ambos nos importara.

bese al animalito en la "frente" o donde yo suponía que esto se encontraba y lo volví a la mesa donde estaban el resto de platillos, unas chicas de por lo menos 14 y 13 años me miraron y rieron de mi actitud, yo solo les ofrecí un saludo a señas con las manos, suspire y me acomode el saco, cuanta paz dios mío, cuanta paz...

Me senté en la silla que estaba enfrente de Liam, para así poder le ver mientras hablamos, hizo una pregunta demasiado inútil o sin importancia, y ahora que recuerdo no sé en que "trabaja" Liam en su vida diaria hay pocos en este pueblo que necesiten de abogado conteste jugando con una servilleta

Pronto llego un muchacho con traje de mesero y con las dos cartas en mano hablo que gustan los señores... dijo, intentando imitar asentó oriental aunque la cara era más americana que nada yo sushi respondí en tono cordial

Rodeé los ojos ante la petición de mi amigo al mesero. -Queremos dos buffetes.- Le dije en tono amable al jóven, el asintió con la cabeza y me dijo que tomaramos lo que gustaramos de la barra y se fue. -Idiota, el sushi es japonés.- Comenté aún con tono de obviedad.

-¿Que te sucede hoy? Supongo que fue demasiado para ti esa visita al cementeio.- Busque mi propia respuesta, quizás el lucía ya mas tranquilo, pero en realidad no lo estaba, estaba seguro de que aún podía recordar la imagen clara de la chica rogando por su vida. Recuerdo también ese día, lo recuerdo a la perfección, mas para mi no son pesadillas o recuerdos compulsivos de los que me quiera deshacer, no, al contrario, esas imagenes las guardo como recuerdos que me serviran de placebos durante mi vida diaria.

el mesero me miro con cara de extrañesa y burla, yo no entendía nada y mire a Liam, como suplicándole por ayuda, esté de inmediato lo entendió y repuso el pedido eso dos Buffetes dije tratando de disimular mi nerviosismo y vergüenza

luego escuche que me llamaba idiota tengo desendencia latina... estos platillos son raros para mi le dije riendo

así era, yo era un hijo de Méxicanos nacido en estados unidos, lo que muchos llaman un chicano luego escuche su siguiente pregunta

a mi no me pasa nada... trate de no verle a los ojos, Améli seguía preocupandome ya pensaste en la propuesta que te hizo nora? trate de que la pregunta sonará lo más casual